LOS GATOS DE ALEKHINE

El tercer campeón mundial de la historia de nuestro juego, Alexánder Alekhine, parecía tener una especial predilección por los gatos, al igual que su última esposa, llegando incluso a pasearlos sobre el tablero de juego en un Campeonato del Mundo.

 

En 2009 ya apareció en Escacultura uno de ellos; pero como pregunta curiosa, dirigida especialmente a los aficionados amantes de estos animales, ¿sabrían decirnos cómo se llamaban al menos dos de sus mascotas?

BONCH-OSMOLOVSKI vs BARÁNOV

Al año siguiente sucedió el desquite:

Mijaíl Bonch-Osmolovski - Borís Baránov

Moscú, 1953

1. e4 e5 2. Cf3 Cf6 3. d4 exd4 4. e5 Ce4 5. Dxd4 d5 6. exd6 Cxd6 7. Ad3 De7+ 8. Ae3

8...Cf5?! 9. Axf5 Axf5 10. Cc3 Db4? 11. De5+ Ae6 12. O-O-O Cc6 13. Dxc7 Tc8 14. Df4 Da5 15. Dg5 Da6 16. The1 Cb4 17. Cd4 Txc3

 

18. Dd8+!! Rxd8 19. Cxe6+ Re7 (19... Rc8 20. Td8 mate; 19... Re8 20. Cxg7+ Axg7 21. Ag5+)  20. Ag5+ f6 21. Cd8+!, 1-0

Las negras se rindieron ante el mate irremediable. ¡Y se ha llegado a un final sorprendente!

Fuente: Curso de aperturas abiertas por V. Panov y Y. Estrin, ed. Martínez Roca, Barcelona 1980, págs. 75-76.

BARÁNOV vs BONCH-OSMOLOVSKI

Enfrentamientos como los de dos ilustres jugadores soviéticos aparecidos ya en Escacultura, que tienen en común estar ausentes de fuentes de consulta habituales, incluyendo incluso bases de datos modernas, no deberían permanecer en el olvido.

Quizá la mejor partida de Borís Baránov sea la disputada frente a Mijaíl Bonch-Osmolovski en el año 1952, que tuvo el siguiente desarrollo:

Borís Baránov - Mijaíl Bonch-Osmolovski

Moscú, 1952

1. e4 e5 2. f4 exf4 3. Ac4 Ce7 4. Cc3 c6 5. d4 Cg6 6. Cf3 Ae7 7. O-O O-O 8. Ce5 Cxe5 9. dxe5 d6 10. Axf4 dxe5 11. Axe5 Db6+ 12. Rh1 Dc5

 

13. Txf7! Txf7 14. Axf7+ Rxf7 15. Dh5+ Rf8 16. Tf1+ Af6 17. Cd5! Cd7 18. b4!, y las negras abandonaron.
 

Fuente: Ataques al Rey, por Borís Baránov, ed. Martínez Roca, Barcelona 1973, págs. 57-59.

UNA FRASE DE HANS REE

“El ajedrez es tan rico que una sola vida no es suficiente para disfrutarlo entero”.

 

Esta frase se atribuye habitualmente al escritor y Gran Maestro neerlandés Hans Ree (Ámsterdam, 1944), pero ¿pueden señalarse fuentes textuales serias de tal atribución?